No pasa nada. Y sí pasa se saluda

Hoy os recomiendo está novela que me leí en 3 días, es una novela fácil y ágil, ya sabéis que yo recomiendo diferentes estilos, esta es la típica novela para pasar un buen rato, y en la que a veces una se siente identificada. Su título es como un refrán callejero No pasa nada.Y si pasa, se le saluda (Editorial Espasa)
La novela resulta a partir de una experiencia propia, Martos tuvo que ser intervenida dos veces de las cuerdas vocales al igual que nuestra protagonista, es un relato divertido, y con reflexiones sobre el trabajo, el amor, los amigos, la familia hechas por una mujer inteligente, con sarcasmo e ironía en muchos casos.
La protagonista se siente mal, con un bajón de autoestima después de haber sido operada, en esas 6 semanas de baja intenta solucionar sus problemas, poniendo en  orden sus pensamientos y sentimientos, e intentar dejar de lado sus miedos irracionales.
La novela se divide en 7 partes –una por semana– y cada semana(capítulo) empieza con la letra de una canción que está relacionado a cuanto sucederá en las páginas siguientes.. Amor, sexo, desengaños mentiras, verdades.. Una novela que os hará pasar un buen rato, y que os divertirá, con unos personajes muy reales.

Sinopsis 

En No pasa nada y si pasa, se le saluda, de Raquel Martos, autora de obras de la narrativa española como Los besos no se gastan, la autora nos plantea la pregunta: ¿Qué se puede hacer cuando parece que no se puede hacer nada? Te sorprenderías... Periodista, guionista, escritora y bloguera, Raquel Martos colabora en algunos de los programas de radio y televisión más populares del momento, como La Ventana (Cadena SER) o El Hormiguero (Antena 3). Inteligencia, desenfado y sensibilidad son los tres pilares sobre los que se asienta esta obra, a medio camino entre la novela y el monólogo, en la que la autora comparte con el lector, con una actitud muy poco políticamente correcta, sus reflexiones, comentarios y reacciones a una realidad en la que, no nos queda otra, tenemos que resistir como podamos... Mordaz, irónica, muy aguda y también sorprendentemente tierna, Raquel Martos nos demuestra cómo se puede pasar de sufrir a disfrutar, de la resignación a la indignación, del odio al amor y viceversa sin las etapas intermedias.